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Los orígenes del airbag se remontan a la II Guerra Mundial, cuando algunos pilotos llegaron a disponer de unos trajes de supervivencia que se podían llenar de aire para que flotaran en el agua y algunos de ellos los activaban cuando iban a sufrir un impacto para retener su cuerpo.

En 1952, apareció la primera patente de un airbag, registrada por el ingeniero norteamericano John Hetrick a quien se le ocurrió el boceto después de sufrir un accidente de coche con su familia. Envió cartas a todas las marcas, que nunca le fueron contestadas, pero esa misma década General Motors, Ford y Daimler iniciaron sus investigaciones sobre el airbag.

Primer airbag

El primer airbag concebido por John Hetrick y patentado con el registro número 2.649.311 utilizaba un balón de aire comprimido y unos primitivos sensores de presión para funcionar. En cuanto empezó sus investigaciones sobre el airbag como dispositivo de retención, en 1957, Ford se dio cuenta de que era imprescindible desarrollar unos sensores más veloces y un sistema de llenado más rápido. Para que el airbag pudiera ser eficaz, la bolsa debía hincharse entre 20 y 40 milisegundos después del impacto.

En 1967, Allen Breed ideó un sensor electromecánico. En 1968, la revista Popular Science publicó un artículo sobre un sistema denominado “Auto-Ceptor”, en el que estaban trabajando Ford y la Universidad de Yale, que constaba de una bolsa que se interponía entre el salpicadero y los ocupantes de las plazas delanteras en caso de choque.

Los 90

En 1994, llega el airbag de corinilla o lateral. Volvo llevaba trabajando desde finales de los 60 en esta tecnología y fue uno de los primeros en adoptarla. La marca sueca, además, introdujo el primer ‘airbag’ de cortinilla o lateral en el Volvo 850 de 1994. Esta bolsa protege el tórax y la cabeza de los ocupantes de ambas filas de asientos en un impacto lateral. 

En 1996, aparece el airbag de rodilla, ese año, el Kia Sportage que se vendía en EEUU y el Toyota Avensis europeo ofrecieron los primeros ‘airbags’ de rodilla, que se generalizaron a partir del año 2000 en el resto de fabricantes.

Los 2000

En 2008 aparece el primer airbag de espalda. Por su peculiar construcción, el Toyota iQ debía ofrecer un sistema que amortiguara el impacto en la cabeza y las cervicales en caso de alcance.

En 2009, Ford presentó el primer ‘airbag’ de cinturón, muy eficaz en caso de colisión frontal para los ocupantes de las plazas traseras, que no disponen de sistemas de retención adicionales. Toyota, Lexus, Mercedes y la propia Ford lo han ofrecido en algunos de sus modelos desde 2012. Ese mismo año, tras un larguísimo desarrollo que se inició en los años 90 de la mano de Ford, en 2012 Volvo fue la primera marca en ofrecer un ‘airbag’ dirigido a reducir las lesiones de los peatones en caso de atropello. El modelo que lo estrenó fue el Volvo V40.

En los años 70

Fue en los años 70 cuando la NHTSA (DGT en EEUU), propuso que en el año 74 las marcas de vehículos a motor deberían equipar los mismos con sistemas de seguridad pasiva que retuvieran al conductor, reseñando los casos en los que el conductor no llevara cinturón. En este punto se dudaba por parte de los ejecutores de la fiabilidad de dicho sistema sin el uso de cinturón, y más aún cuando los ocupantes fueran menores, algo lógico y en lo que tenemos que darles la razón; sin duda un dato curioso que hoy en día no tiene cabida en nuestros pensamientos.

Este dispositivo ha ido evolucionando, hasta el punto de que se ha instalado en todas las partes del vehículo, no sólo nos le encontramos en el salpicadero sino también en las partes laterales, y se sigue evolucionando tanto a nivel de materiales como de formas de aplicación, se está probando incluso la instalación de los mismos en las ventanillas, para el caso de colisiones laterales.

Es desconocido por muchos, el mantenimiento que debe llevarse del airbag, algo que de no hacerse puede provocar graves lesiones en caso de accidente. El airbag al igual que todos los sistemas de seguridad del vehículo debe ser revisados puntualmente, para que su efectividad y seguridad no se vena aminoradas.

Los airbag CADUCAN

Los airbag CADUCAN, los expertos establecen la fecha de caducidad a los diez años de la fabricación del coche, pero te recomendamos revisar el libro de mantenimiento de tu vehículo para comprobar las indicaciones concretas del fabricante del modelo que conduces y las condiciones de mantenimiento. De hecho, muchos vehículos modernos cuentan con airbags diseñados para durar toda la vida útil del vehículo.

La revisión suele indicarse cada cinco años o 120.000 kilómetros. Por lo demás, estás obligado a revisar y sustituir el airbag en caso de que sufras un impacto y éste se active. Es algo vital hay accidentes cuyas consecuencias se han agravado por el estado del airbag provocando quemaduras muy graves.

Cuando nos sentamos en el vehículo también influye la posición que adoptemos, debemos sentarnos correctamente al volante, ya que la activación del airbag puede llega a causar graves lesiones si no a una separación mínima de 25 cm del volante. Debemos recordar que es un complemento del cinturón pero NO un sustituto del mismo. Destacar, que está prohibido llevar una silla en sentido contrario a la marcha en el asiento delantero con el airbag frontal activado, si este no se desactiva, las posibilidades de muerte superan el 95%.

Debemos dar más importancia a este elemento, no porque nuestro vehículo lo tenga viajamos seguros, sino hemos realizado los mantenimientos será nuestro enemigo en caso de impacto.

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Fuentehttps://fundacionavata.org/blog/
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