El Servicio de Educación Inclusiva de COCEMFE CV ha tenido un intenso final de año. En noviembre y diciembre ha acudido a un total de seis centros escolares. En cada uno de estos ha formado y sensibilizado en Educación Inclusiva a un total de 338 personas. A esto hay que sumar consultorías particulares realizadas a seis familias y en las que participaron once personas más.
En concreto, las técnicas de COCEMFE CV y COCEMFE han realizado en este periodo tres consultorías para los profesionales de centros escolares. Formaciones que han contado con la participación de diez personas. Además, han desarrollado cinco formaciones en Educación Inclusiva para 27 miembros del personal docente. Por si fuera poco, han llevado a cabo seis acciones de sensibilización entre el alumnado. El resultado global es la formación y sensibilización de 280 estudiantes y 21 personas del profesorado.
Estas acciones de COCEMFE CV se han producido en centros del Grao de Gandia, l’Alcúdia, Utiel, Manises, Torrent y València. De todas ellas, cabe destacar una consultoría de información y asesoramiento sobre cómo crear un espacio de patio accesible, inclusivo y coeducativo. Y es que, en dicho centro, se está elaborando un proyecto para modificarlo. Del mismo modo, se asesoró sobre diferentes tipos de metodologías inclusivas en el aula. Además, se les informó sobre cómo llevarlas a cabo en casos concretos de alumnado con discapacidad.
También se ha ayudado a crear materiales educativos de bajo coste. Es el caso de una mesa de luz y de una sala ‘snoezelen’, que ayuda a la estimulación e integración sensorial. Un sistema que permite también crear un espacio para la calma y la relajación en casos de estrés durante las clases. De la misma manera, se ha hecho entrega de un panel multisensorial a un centro de Educación Especial de València.
Consultorías de COCEMFE CV a familias de forma privada
En este último periodo ha destacado también la realización de una mayor cantidad de consultorías con familias de forma privada. En éstas se les trata de asesorar sobre la mejor forma de tratar las necesidades propias de la persona con discapacidad. El objetivo es conseguir una mejor inclusión en el aula y unos mejores resultados educativos. Esto se logra con la participación no solo de madres y padres, sino, en algunos casos, también de hermanos y hermanas.
Además, este tipo de actuaciones también se dirigen hacia familias que no tienen miembros con discapacidad, pero que conviven en clase con alguna persona que sí la tiene. Esto se hace para sensibilizarlas, fomentar el respeto y evitar situaciones de acoso hacia ellas.
