Muy ligado a un artículo que se publicaba en este medio sobre el FOMO, nos queda claro que nuestro autoconcepto se construye gracias a las referencias que nos llegan del exterior. ¿Y qué pasa si nuestras únicas referencias vienen de las redes sociales? Que entones esas referencias están adulteradas.
¿Qué rede social es la más dañina?
Después de varios estudios realizados, han podido clasificar a las redes sociales desde la más dañina a la menos. Instagram y Snapchat gana por goleada pero por negativas. Las dos plataformas son clasificadas como las peores para el bienestar y la salud mental. Están muy centradas en la imagen y pueden provocar sentimientos de inferioridad y ansiedad en los jóvenes.
Según el estudio, dependiendo de la personalidad del usuario, el tiempo que pasa en la aplicación y del tipo de red social, pueden afectar a la salud psicológica. Pero, dejando a un lado el mal uso que hagamos de ellas, sabemos que pueden llegar a ser adictivas.
«Muestran que el esfuerzo y dedicación valen menos que el postureo»
Otro hándicap de las redes sociales es que, por ejemplo Instagram, es la más utilizada entre los jóvenes y esto conlleva importantes riesgos. Esto es debido a que los jóvenes se encuentran en pleno proceso de construcción personal y adquisición de valores para vivir en sociedad. Sin embargo, las redes sociales les muestran que el esfuerzo y la dedicación vale menos que un postureo.
Por otro lado, tenemos que tener en cuenta que las redes sociales han dejado de ser medios para relacionarse y se han convertido en escaparates y espacios de publicidad. Se han convertido en una red de negocio y «casi todo» vale.
En dicho estudio se determinó que Facebook y Twitter tampoco se salvan. Las tres redes tendrían un impacto negativo en el bienestar. Sin embargo, sólo Youtube se considera la red social con un impacto positivo.
Las redes sociales nos empequeñecen
Por eso, siempre es bueno preguntarse y reflexionar sobre la distancia que hay entre las imágenes que se muestran en las redes y lo que nosotros podemos conseguir en la vida. En las redes sociales podemos parecer tan pequeños cuando en realidad tenemos la posibilidad de ser muy grandes.